domingo, 19 de junio de 2005

Dos pañuelos, peine, cortauñas y Codigo de Honor

Honor: es equivalente a dignidad, decoro, distinción, honradez, conciencia, decencia, honestidad, nobleza, probidad, entereza, lealtad, recato, pudor, vergüenza, gloria.

Los institutos de formación profesional de la Fuerza Armada Nacional (FAN) manejan mucho el concepto del honor. Existen Consejos de Honor para valorar las faltas al honor; existe un honor militar, así como existe ¿un honor entre rateros? Cantamos al honor al levantarnos, durante la primera formación de trabajo y durante todo el día estamos rindiendo culto al honor hasta en la noche cuando las notas de del corneta llamando a Silencio, nos señalan que ese día, fuimos cadetes honorables. Y se trabaja durante los cinco años de formación con un cartoncito que se llama el Código de Honor del Cadete, en el cual una de las faltas más graves, es no cargarlo en el bolsillo y sabérselo de memoria, acompañado con dos pañuelos, un peine y un cortaúñas.

Cuando un cadete va a salir a la calle franco de servicio en su paseo de fin de semana, la primera revista que se le hace en la formación es “Dos pañuelos, peine, cortaúñas y Código de Honor”. Antes que revisarse la presentación personal y el cumplimiento de tus obligaciones académicas, militares y disciplinarias; la presentación del paquetico con los dos trapitos blancos e impecables, el peine de carey, el cortaúñas metálico y el decálogo empastado con las normas nobles, tenia que estar a la mano.Manos impecables estiradas al frente en posición horizontal y escrupulosamente manicuradas para pasar revista del corte de uñas y el uso del aparatico en cuestión, sonadores de moco intachables en la blancura y la nívea presentación y por supuesto el Código de Honor del Cadete; suerte de tablas de la ley del Dios “Superior” que te obligaba a recitar al caletre todos y cada uno de los artículos; bajo pena de pagar doscientas presentaciones como mínimo o si estabas de mala, una soberana “mierdera”.

No cargar ese ajuar de honestidad, esa dote de probidad, ese capital de distinción y ese menaje de decencia que significaba el pasaporte hacia el Olimpo de la Vergüenza y el recato del Instituto de Formación Profesional de donde se procediera (Academia Militar de Venezuela, Escuela Naval de Venezuela, Escuela de Aviación Militar y Escuela de Formación de Oficiales de la Guardia Nacional, según fuera el caso); significaba que automáticamente ibas a uniformarte de “Campaña a toda vela” y pasar todo el sábado y domingo redoblando paso en el Patio de Ejercicios, mientras que tus compañeros de promoción y de farra sabatina, disfrutaban de su permiso.

Así es la vida de formación profesional del futuro oficial de la Fuerza Armada Nacional y así se machacaba conscientemente para que se internalizara el concepto del Honor. Un estribillo que se subraya de manera porfiada en toda suerte de contingencia castrense. Para todo hay que apelar al honor.

Desde el toque de Diana hasta el toque de Silencio, la vida de los cuarteles es una especie de culto permanente al honor. Incluso hasta para dormir en las formas, maneras y atributos, el militar sigue en una inquebrantable fe en el camino de alcanzarse en su Nirvana particular, en el cultivo del valor del honor.

El Himno de la Academia Militar de Venezuela (el Alma Mater del componente Ejercito) remacha que a la patria debemos una contribución de inmortal agradecimiento y de amor, porque este había sido fundado para hacerlo guardián de su honor; igualmente si revisamos el de las otras escuelas observamos que se repite la palabra honor con cierta ratificación hasta fastidiosa.

El Himno del Ejercito en la segunda estrofa señala que “y si el brazo extranjero se atreve, a infamar de este suelo el honor, antes muerte mil veces nos llegue, que rendirnos al torpe invasor”.

El himno de la Armada de Venezuela reza “Al combate valientes marinos, nada importa morir en la mar, si se salva el honor militar, y la patria y sus nobles destinos.”

Los aviadores no se refieren al honor de manera textual pero hablan del patrio decoro cuando entonan hasta el fastidio, con el pecho lleno de aire: ““Aviadores unidos juremos, en las notas del himno sonoro, que luchando hasta el fin moriremos, en resguardo del patrio decoro”.

La Guardia Nacional que tiene como lema “El honor es su divisa” se desgañita en los patios de formación en su coro “Ante Dios y la Patria juramos, con sincera y profunda emoción, que el deber por consigna llevamos y por alta divisa el honor”.

En fin, el honor es un comodín que sirve de escudo en la propia vitalidad de la Fuerza Armada Nacional (FAN); sirve para todo y sirve para nada. Convenientemente, en las posiciones de poder sirve para perseguir, para hostigar, castigar, reprimir, sancionar y amenazar; pero como modo de vida, como balanza y equilibrio en las actuaciones del poder militar, como coco cuando se va a meter la mano y otras extremidades en las arcas publicas, es mejor que continúe en el sótano de la indignidad y dejarlo para esas ocasiones rimbombantes de las fiestas patrias, cuando los cadetes desfilan con sus uniformes impecables, sus zapatos pulidos, su paso marcial y sus anhelos de coronar exitosamente su carrera profesional; sin pensar que mas allá de la entrega del sable en la ceremonia de graduación conjunta, hay una vida de trapisondas, de zancadillas, de maniobras arteras contra el honor militar.

Estos tiempos revolucionarios me han permitido aclarar algunas dudas que arrastraba desde los lejanos tiempos de cadete, ante esos requerimientos compulsivos que hacían algunos superiores, cada vez que estaban ladillados y querían desestresarse; de exigir a todo subalterno que se le atravesara en el camino, con actitud de malandrín y entonación de quien esta pidiendo peaje en cualquier callejón de barriada: “Epa Cadete, dos pañuelos, peine, cortaúñas y Código de Honor”.
Ante tanto asalto a las arcas publicas por parte de nuestros uniformados, ante la invasión cómplice de Fidel Castro y sus barbudos, ante la destrucción de la organización por la lenidad de sus mandos capones, ante la disminución de la cacareada soberanía, ante el desprestigio de sus cuadros militares, ante la desinstitucionalizacion de la Fuerza Armada Nacional, frente al peligro de la desaparición de la unidad nacional ante las mentes estólidas del Alto Mando Militar; en fin ante tanta cobardía personal, blandura grupal, temor colectivo, sumisión institucional., genuflexión lacayuna, apocamiento de escroto, humillación organizacional, capitulación unitaria, rendición histórica y entreguismo manifiesto de los bufones con soles que hacen cabeza en la organización militar; he conseguido al fin una justificación para cada uno de aquellos requerimientos de la vida de cadete.

Soy fanático del cine y me rindo ante la trilogía cultivada en la saga de Francis Ford Coppola en El Padrino. Pero, al mismo tiempo, filmes como El Golpe, El Gran Gatsby, Los Intocables, etc. tienen mi atención y forman parte de mi colección particular, que reduce, hasta niveles manejables, el stress revolucionario de la coyuntura cuando las proezas de la nomenclatura del régimen no concilia lengua y cerebro, razón y pasión, verbo y hecho; normalmente en la mayoría de sus actuaciones.

He aprendido de esas cintas que un verdadero mafioso debe atender a unas formas en su vestuario y presentación, más allá del delirio. Y que observa hasta la muerte, el cumplimiento de unos códigos para mantener vigente su organización delictual, sobre el templo del honor.Quien se salga de esas formas, no asciende en el escalafón del delito, y la muerte es la consecuencia de salirse de la carretera que lleva al Obelisco que se levanta en el campo del delito, que es el honor.

Un delincuente de altura debe tener las uñas escrupulosamente manicuradas y las manos celosamente amansadas con cremas y protegidas con la blancura de los guantes.
Un mafioso que se precie, debe trazar rigurosamente la carrera de su peinado y no permitir que una greña de su corte militar se salga de formación.
Uno de sus níveos pañuelos debe estar presto para secar alguna indiscreta gota de sudor que corra imprudente por sus cuidadas y lisas mejillas, después de una rigurosa y meticulosa afeitada a navaja limpia.

Pero, complementando esas maneras, el cartoncito que decanta en el decálogo de las virtudes militares y que se conoce como el Código de Honor, tiene muchas aplicaciones y es el fiel de la balanza en las actuaciones de los militares venezolanos.

Mientras no se cumplan los diez artículos reseñados en él, sus integrantes sigan aferrados al código de la Omerta y no se ajuste el comportamiento militar a ese decálogo, la Fuerza Armada Nacional (FAN) tendrá comportamiento de mafia siciliana, de Camorra napolitana, de Cosa Nostra, de organización delictiva de cuello blanco y no pasara de ser otra organización con El Padrino Don Giorgio Luigi García Carneiri ejerciendo funciones de Capo di Tutti di Capos; los comandantes de componentes como Capos de Familias, el cuerpo de generales y almirantes como Capos de familias menores, el resto de los cuadros militares como soldados y las funciones institucionales, consagradas en el articulo 328 y 329 de la Constitución Nacional de la Republica Bolivariana de Venezuela las parcelas del delito correspondiente a prostitucion, drogas, protección, juego, licores, etc. que corresponden a la mayor fuente de ingresos de la familia.

Todo esto queda confirmado, con la reciente decisión, argumentada en corrupción, del Presidente de la Republica de desactivar una Unidad de Maniobra de la familia Carabinieri para asignarle ese territorio a la familia Badueli, con lo cual el oro, los diamantes, la madera, la prostitución, las drogas, el trafico de humanos y de combustible en el sur del país, pasan a ser el Chicago exclusivo de esta familia y sus ejecutorias organizacionales, fuente de la inspiración de Mario Puzo.

Moraleja: Un sábado de abril de 1974, en el dormitorio del tercer pelotón de cadetes de la primera compañía, de la Academia Militar de Venezuela; el sub.-Brigadier Jorge Luis García Carneiro, pulía con toda la paciencia del mundo sus brodequines, la hebilla y el correaje del uniforme de paseo. En un rincón de su litera, parado firme, con vista al frente saludo y rumiándose toda su arrechera del plantón de dos horas, estaba el Cadete de Primer año Andrés Cantón Álvarez. Garnica (así le decían confidencialmente sus subalternos también) pasaba en círculos pausados el algodón impregnado de agua y crema de zapatos, que iba arrancando la pulitura destellante en la negra superficie del calzado de paseo, mientras le remachaba verbalmente, con cadencia paquidérmica al cadete subalterno, tratando de quitarle la mayor cantidad de bilis; “¿Entonces, Cantón? ¿Cantón, entonces? ¿Te sabes o no, el articulo 6 del Código de Honor? ¡Vamos a repetírtelo nuevamente de memoria! Y se arrancaba muy lentamente, haciendo énfasis en las palabras, por enésima vez en esas largas dos horas de ladillismo, con; “Prometo guardar culto al valor, a la honestidad y a la verdad; que practicare y mantendré. Aun con riesgo de mi propia seguridad y bienestar”.

Otra Moraleja: Otro sábado, de noviembre de 1975, en el Puesto de Comando del entonces Puesto Fronterizo de Carretal, jurisdicción del municipio Mara del estado Zulia, el flamante Subteniente de Infantería Jorge Luis García Carneiro, recibe la visita en su oficina, de un compañero de trabajo, que estaba en preparativos para organizar su matrimonio. Bien dateado que estaba este, de que Garnica tenía en el depósito una cantidad considerable de güisqui decomisado en los camellones chirrincheros a estos pobres que defiende ahora en la revolución; se había acercado hasta la instalación fronteriza para convencerlo de que le vendiera el licor para la fiesta, a un precio de “compadres”. Una replica en tamaño gigante del Código de Honor del Cadete, hace fondo en la oficina de Garnica, mientras su compañero se lanza de frente con la tarea de ablandamiento verbal.-¡Compadre, véndame 20 cajas de güisqui, déme un buen precio, no me lo ponga muy alto!-¡No, compadre, lo mínimo que te voy a dejar la caja es a trescientos bolívares! ¡Con menos, voy perdiendo! Le retrucaba Garnica con argumentos de beduino y la misma paciencia con que pulía sus brodequines, para irse de permiso.-¡Compadre, no se haga el duro; que yo sé que ese güisqui no le costó a usted, nada! Se aventuro el colega de Garnica con la esperanza de que este cediera en el regateo.-¿Cómo que nada compadre? ¿Y mi honor? Ese lanzazo fue suficiente para cerrar la operación comercial del güisqui.

Los dos pañuelos, el peine, el cortaúñas y el Código de Honor de la época de cadetes no son distintos a estos de los predios revolucionarios.
Poco sudor, poco desmelenamiento y uñas exageradamente largas hacen la diferencia en el Código de Honor de estos mafiosos revolucionarios.
Honor: es equivalente a dignidad, decoro, distinción, honradez, conciencia, decencia, honestidad, nobleza, probidad, entereza, lealtad, recato, pudor, vergüenza, gloria.

¡Don Giorgio, L'Omerta è stato finito, Nostra vendetta è presto! ¡L'onore venezuelano l'esige!
Vieja canción de marcha de los soldados;

“Oh patria mía, patria querida, voy a la guerra, a luchar por ti; mas cuando vuelva, sin que sea vencido, guardián de mi patria, velare por ti. Honor, honor, honor a Venezuela, los buenos soldados, siempre guardaran. Honor, honor, honor a Venezuela, los buenos soldados, siempre guardaran”

miércoles, 15 de junio de 2005

El centinela

(Himno Nacional de fondo)

AUTOR: El Teniente Coronel Hugo Chávez Frías, dueño y señor de Venezuela, desde el 2 de febrero de 1999 hasta nuestros actuales días, había quedado traumatizado hasta niveles patológicos, después de los hechos del 11 de abril de 2002. Teniendo a “El Príncipe” de Maquiavelo como libro de cabecera y siendo un gran cultor de Catalina de Médicis, aplicaba a cabalidad, el axioma de la florentina: “Dividir para reinar”.

(Ruido de grillos. “Diana Carabobo” de fondo)
Chávez: Ministro ( al De la defensa que esta al teléfono), vamos a nombrar como Jefe del Estado Mayor de la Tercera División de Infantería al General de Brigada Felix Antonio Velasquez.
Ministro: (Carraspeando) Disculpe señor Presidente, pero yo no se si usted esta enterado que entre el General Velasquez y el General Acosta Pérez, existe una enemistad profunda.
Chávez: (Sentencioso) Por eso mismo Garnica, así se vigilaran el uno al otro y nunca se pondrán de acuerdo. ¡Como se ve que no estas en la jugada!

NARRADOR: E indefectiblemente, así designaba a los Comandantes de Batallón. Todos estos formaban parte de sus protegidos y se reportaban directamente, obviando la natural línea de mando, al Comandante en Jefe y dejando como unos auténticos mangas miadas a los generales comandantes de brigada y de divisiones; y al propio Comandante General del Ejercito.

(Toque de señal de unidad. Timbre de telefono que suena y telefono que se levanta))Comandante de Batallón: (Al teléfono) Buenos días, Mi Comandante en Jefe (Canto de un gallo a lo lejos), le informo que su Batallón esta sin novedad.

Chávez: (Cordial) Buenos días Medina Calles, ¿cómo están las cosas en Carora? ¿Y la comadre? ¡Mandamele la bendición para el ahijado! ¡Oye...el queso de cabra que me enviaste estaba bien bueno! ¡Ponte mosca con tu general Pantoja en Barquisimeto, cualquier cosa me lo pones preso por orden mia y lo mismo al de la Guardia Nacional! (Toque de atención de fondo)

(Toque de Oracion en primer plano y luego de fondo)

NARRADOR: De esa manera se relacionaba el Comandante en Jefe de la Fuerza Armada Nacional con sus colaboradores de la revolución bolivariana dentro de las filas de la Fuerza Armada Nacional y especialmente en aquellos cargos que incluían el comando de las tropas, quienes habian sido objeto de una escrupulosa selección, desde sus dias en la Academia Militar de Venezuela. Nunca como ahora la letra del toque de Oracion que recordaba el juramento de promesa de fidelidad a la Bandera Nacional de “Prometeis a Dios y a la Republica, defender la Patria y sus instituciones hasta perder la vida, y no abandonar jamas a vuestros superiores” tomaba tanta vigencia. Chavez era la institución del Presidente de la Republica, la institución del Comandante en Jefe y era el Supremo de la Nacion. El superlativo militar y civil.

NARRADOR: Por seguridad dormía una noche en la cuadra de la tropa, otra en un apartamento convenientemente coordinado, la otra agarraba una motocicleta y se perdía por los laberintos de Caracas, al encuentro de la damisela que ya le había coordinado previamente el Mayor Jesús Suárez Chourio; quien hacia las veces de su Jefe de Seguridad y su Ministro de Alcoba.

(Toque de una puerta y ruido de bisagras)
Mayor Suárez: (Adulón y socarrón) Señor Presidente, Buenos dias. Acuérdese que la señorita que seleccioné lo va a esperar después de las siete de la noche en el apartamento. ¡Ya usted sabe quien es! Ya organizamos las dos caravanas y la motocicleta. El carro especial sale conmigo y ya ella estara instalada después de las cinco. Todo esta coordinado. ¡Por cierto (muy adulon y mas socarron) ya le vi una como las que a usted le gustan!
Chávez: (Grave) Tranquilo negro. Eso va a ser más fácil que echarle un tiro al suelo. ¡Ese boche no lo voy a pelar! ¡Llámame a Rodríguez Torres! (Confidente) ¡De la otra chencha vamos a hablar después!
Mayor Suárez: Señor Presidente en la línea esta la llamada para el General Quintero Viloria.
Chávez: (Serio e imponente) Quintero, quiero para la próxima semana que el alistamiento de la Reserva Nacional sea un hecho. (Levantando la voz) No debe haber novedad en la orden.

NARRADOR: A unos les imponía la distancia del cargo y del grado; y a los otros les tendía un manto de confianza que generaba el natural recelo y la envidia entre superiores y subalternos. Era un hecho que Chávez privilegiaba en el trato a los oficiales formados por el, durante su paso por la Academia Militar de Venezuela, como oficial de planta. En cambio generales y almirantes, corrían delante del Comandante en Jefe presurosos y nerviosos para evitar un llamado de atención, una amonestación verbal o simplemente pasar sin cargo a su domicilio, por haber entrado en desconfianza.

NARRADOR: A media mañana, Chavez aborda un automóvil discretamente con placas normales. (Pasos. Cierre de dos portezuelas)
Mayor Suarez: ¿Hacia donde nos dirigimos, Señor Presidente?
Chavez: ¡Hacia Fuerte Tiuna!
Mayor Suarez: (Energico) Entendido señor Presidente.(Ruido de carros y cornetas. Carro que se desliza)
Chavez: Bonita que esta la mañana. ¿No te parece Negro?
Mayor Suarez: ¡Asi es señor Presidente!
Chavez: ¡Mira como estan abandonados los cultivos hidroponicos en la avenida! Acuerdame mañana de llamar al General Acosta Perez para que le mande a echar un poco de cagajon a las matas. Estoy viendo que los estantes para el megamercado de mañana estan retrasados. ¡Llamame a al General en Jefe Garcia Carneiro!
Mayor Suarez: ¡Entendido Mi Comandante en Jefe!
Chavez: (Imperativo) ¡Parate aquí negro!
Mayor Suarez: ¡Entendido Mi Comandante en Jefe! Pero...¿No ibamos para Fuerte Tiuna?
Chavez: (Jodedor) Pero bueno negro, ¿Todavía no has aprendido que no hay que decir para donde se va? ¡Asi no se cae en los peines!

NARRADOR. Luego de rondar de incognita por los alrededores del desorden del megamercado, acompañado siempre del fiel Mayor Suarez Chourio, Chavez regresa al vehículo. (Portazo)
Mayor Suarez : ¡El Ministro de la Defensa nuevamente al telefono!
Chavez: ¡(Cordial) Gracias negro! (Severo) ¡General Garcia Carneiro! Las matas del Paseo Vargas son una perfecta cagada. Hay una perrera gozando una bola y un vivac de indigentes en el sector de la siembra. Solucioname ese peo de la manera mas discreta posible. Coordina con el Alcalde. Dimele al General Acosta Perez que me le mande a echar cagajon a las matas. ¡Por acá cargo el expediente del Coronel Gavidia Bastardo¡ (Cuelga el telefono. Ahora se dirige al Mayor Suarez) Dime una cosa negro...¿Tu crees que Gavidia servira para general? Garnica me lo esta metiendo por los ojos.
Mayor Suarez: (Enfatico) ¡Gavidia es escualido Mi Comandante en Jefe!
Chavez: (Levemente severo) Ahora si negro, dale para La Casona.

NARRADOR: Chavez manejaba la Fuerza Armada Nacional con el criterio de quien habiendo sido parte ella, recelaba de una institución que aun se aferraba inútilmente a sus valores y principios para no zozobrar definitivamente. Pero ademas, Chavez albergaba un profundo resentimiento por la escasa solidaridad de su organización de origen, durante el golpe de estado del 4 de febrero de 1992, especialmente quienes eran generales y almirantes y le dieron la espalda en aquella ocasion. Les daba duro en las decisiones como Comandante en Jefe y a sus generales y almirantes los humillaba despóticamente, publica y privadamente. Era clasica su postura uniformado como Teniente Coronel del Ejercito; mientras generales y almirantes se comian sus higados por pararseles firmes a un subalterno en el grado. Por eso Chavez los barria delante de otros subalternos, especialmente quienes habian participado en la asonada febrerista y habian compartido la carcel con él, por esos sucesos.

Un general: (Bravo) ¡Que bolas tiene Chavez! ¡Ahora resulta que un teniente o un capitan tienen mas poder que un general! ¿Y entonces? ¿De que me sirve tener sobre los hombros al Sol de Carabobo? ¿Es que yo me saque estos soles en una caja de Ace? ¿Ah Teniente? ¡Cuidado con una vaina y me pones la piedra con tu Comandante en Jefe!
Ayudante: (Formal) ¡Los honores, mi general! (Toque de Asalto)

NARRADOR: Los generales y almirantes de la Fuerza Armada Nacional mantenian con Chavez una relacion basada en el temor. Todos temian a la espada de Damocles de quedar en un limbo organizacional en cualquier momento. El momento menos esperado se presentaba un sustituto a ocupar su cargo y eso significaba largos meses en la casa, esperando un cargo y la suspensión de la jugosa prima por lealtad revolucionaria que venia directamente de las nominas de PDVSA. Una delacion por algun organismo de seguridad, una infidencia de algun agente de inteligencia, un rumor de los compatriotas del MVR, alguna queja de un compatriota dignificado que no fue atendido oportunamente en las ayudas economicas, un chisme convenientemente deslizado en el despacho presidencial por algun subalterno; eran motivos suficientes para que un general o almirante, jefe de una guarnicion militar o alguna unidad operativa, fuese defenestrado y entrara en desgracia. Asi funcionaba el merito, el escalafon y la plaza vacante para ascender. Merito revolucionario, escalafon lisonjero y plaza vacante bolivariana.

Ayudante: (Formal) ¡Los honores, mi general! (Toque de Alto al fuego)

NARRADOR: La Fuerza Armada Nacional es una de las instituciones mas antiguas del mundo. Incluso, tanto como la Iglesia. Como tal se nutre de valores, de principios, de normas. Todos ellos se convierten en símbolos. Uno de los símbolos mas emblematicos de la Fuerza Armada Nacional es la jerarquia. La jerarquia es la base del funcionamiento vertical de la organización y de donde se nutren la disciplina, la obediencia y la subordinación.
(Ruido de vehículos que se detienen. Puertas que se abren y se cierran. Toque de Ataque)
Oficial: (Grave) Mi General en Jefe, le informo que no hay novedad en el Ministerio de la Defensa.
Ministro de la Defensa: (Grave) Muchas gracias Coronel. (Dirigiendose al Ayudante) A media mañana me recuerdas llamar al Comandante de la Tercera Division de Infantería para que le ponga cagajon a los cultivos hidroponicos del Paseo Vargas. Pero antes, que vengan a hablar conmigo los portugueses de la charcuteria y los quesos del Megamercado.

NARRADOR: El Ministro de la Defensa, cuando es un oficial en situación de actividad, es la autoridad militar mas alta dentro del Ministerio de la Defensa. De el dependen el Inspector General de la Fuerza Armada Nacional, el Jefe del Estado Mayor Conjunto, los Comandantes de Componente y el Jefe del Comando Unificado Numero uno de la Fuerza Armada Nacional. De todos estos, el cargo mas importante, porque significa el manejo mas importante del recurso humano en la organización militar, es el Comandante General de Componente.
(Ruido de vehículos que se detienen. Puertas que se abren y se cierran. Toque de Llamada de Oficiales)

Oficial: (Grave) Mi General de Division, le informo que no hay novedad en el Comando General del Ejercito.
General: (Mas grave aún) Muchas gracias Coronel. ¿Estan quemando el incienso y el sandalo en mi oficina? ¿Le prendieron la vela a Santa Barbara y a la Virgen del Carmen? Este humilde soldado de Infantería de paracaidistas va a tomarse unos minutos para reflexionar y oir unos cantos gregorianos para iniciar el dia.

NARRADOR: Esa era la rutina de la Fuerza Armada Nacional en el proceso revolucionario de Hugo Chavez Frias. (Toque de Silencio al fondo). El centinela mas importante de la Nacion y la Constitución Nacional se debatia agonico entre los caprichos de un Satrapa que la manejaba a su antojo y que hacia esfuerzos dia a dia para destruirla en sus emblemas que la constituian como institución fundamental del estado venezolano. La jerarquia era ya un guiñapo en las manos de Hugo Chavez y en los hombros de sus generales y almirantes, los valores yacian en un rincón junto con sacos de yute plenos de estiércol para fertilizar los cultivos hidroponicos del Paseo Vargas, los principios boqueaban entre humos fragantes de sandalo, incienso, mandarina, limon y otros efluvios y emanaciones orientalistas, conveniente y oportunamente musicalizados con Cantos Gregorianos y Vivaldi. La obediencia, la disciplina y la subordinación eran un trípode para sostener la forrada prima que procedia de las arcas de PDVSA, para garantizar la lealtad al proyecto politico revolucionario del Comandante en Jefe. Mientras tanto el Centinela Presidencial cumplia con su mision de salvaguardar la integridad del Primer Magistrado Nacional y preservar la institución de la figura del Presidente de la Republica, a traves de las muchachotas que seleccionaba convenientemente el edecán de aposento.

Chavez: (Campechano) ¡Ahora si negro, dale para el apartamento de la chencha, que a esa si le voy a dar lo suyo a discreción!
Mayor Suarez: (Serio) Hablando de discreción, acuerdese Presidente de pedirle a esa muchachita discreción, no vaya a ser que Mi General se ponga bravo si se entera, como el otro, con lo de la esposa.
Chavez: (Mas campechano aun) Mira negro, con ese cargo que tiene el gordo y con los reales que le caen, ese no va a estar pendiente de ninguna muchacha. El otro general lo que pasa es que no recibio el cargo que esperaba, sino se hubiera quedado callado; ese es un rolo e´pendejo. ¡Dale choleao vale!
(Himno Nacional de fondo)
NARRADOR: Asi lidiaba la Republica Bolivariana de Venezuela con sus asuntos de gobierno y de estado; por un lado el Presidente de la Republica trasladaba hasta los predios de la bragueta todo genero de decisiones y los asuntos del alto gobierno; y por otro, sus generales y almirantes asignaban prioridad a abonar con cagajon los cultivos hidroponicos y elevaban a niveles de alcahuetería su comportamiento institucional, incompatible con el Sol de Carabobo que llevaban sobre los hombros y que extendian hasta los confines de la tercería del Primer Centinela del Primer Magistrado.
(Redoble de tambores y toque de atención)

FIN

viernes, 10 de junio de 2005

La crisis de los cohetes de 1.962

La reciente decision del Presidente Chavez de desactivar el Comando Regional numero 8 de la Guardia Nacional y los argumentos usados para justificarla, dejan al descubierto una serie de interrogantes en las que todas apuntas hacia otro tipo de elementos mas contundentes.
En efecto, el Comandante en Jefe, aduce razones de corrupcion para razonar la misma.
Tradicionalmente, el Comando Regional es el "lomito" de los cargos para los generales del componente Guardia Nacional. Un oficial general designado para ese cargo, sabe de antemano que tiene garantizada su inclusion en el Alto Mando de la Fuerza, al termino del año de la gestion. En torno a ese cargo orbitan todo genero de corruptelas derivadas del control del trafico ilegal del oro, diamantes, mineria en general, madera, drogas, combustible, prostitucion, trafico humano, etc.

Si nos atenemos a las razones esgrimidas por el Presidente para la desactivacion de esa importante unidad de la guardia nacional, entonces habra que desactivar a toda la Guardia Nacional de Venezuela, pero con ese mismo impulso, desactivar a unidades de la Armada y de la Aviacion, contaminadas por el morbo de la corrupcion en la ejecucion del Plan Bolivar 2000 y el alto numero de profesionales militares que hace vida larvada en el rendimiento, dentro de la administracion publica. Lo mas importante es que quien lleva la batuta en materia de corrupcion en este momento, son los profesionales del Ejercito Venezolano, Forjador de Libertades; con lo cual, eso desvirtua la decision del Comandante en Jefe. De tal forma que la razon de la corrupcion se descartan por si misma. El agregado mas importante es que la Fuerza Armada Nacional (FAN) quedaria desmantelada, si se aplicara el criterio Chavez para eliminar el CORE 8.

Descartando el oro, los diamantes, la madera, las drogas, la prostitucion, el trafico humano, el combustible y la mineria en general; el unico argumento de peso que pudiera prelar por encima de los anteriores; es la obsesion reciente de Chavez por disponer en corto plazo de energia nuclear y anclarse en el convenio recientemente suscrito entre Venezuela e Iran para transferir tecnologia nuclear a Venezuela.Ya existen pasos adelantados sobre el particular, Chavez ha viajado en varias oportunidades a Iran y el Presidente Iraní ha visitado el pais. Ya existe la infraestructura de fachada a traves de la fabrica de tractores en el estado Bolivar; este estado esta gobernado por un general de division de confianza de Chavez y en el sector hay un alto potencial de produccion de mineral estrategico como el Uranio.De tal forma, que el unico inconveniente para que Chavez tenga en un corto plazo, con la suficiente seguridad y secreto para garantizar la sorpresa a los vecinos y a Estados Unidos; material tactico de naturaleza nuclear, capaz de latirle en la cueva a los gringos, y generarle una crisis similar a la ocurrida en octubre de 1962, que puso al mundo al borde un holocausto nuclear; es la presencia de la Guardia Nacional de Venezuela con jurisdiccion en el estado Bolivar y Delta Amacuro. Eso se soluciona con un plumazo que desactive la unidad responsable y descargar la responsabilidad de la decision, en la corrupcion.

Como leen, si esta situacion no se denuncia, no se le hace seguimiento y no se emplaza al gobierno venezolano a presentar la realidad del sur del pais; no es de extrañar que en un breve plazo, la histeria revolucionaria de Chavez y su carnal Fidel nos pongan nuevamente al borde de una catastrofe de magnitud planetaria.

La historia está a la mano, en 1962 el mismo Premier Nikita Kruschev tuvo que frenar y pasarle la mano a Fidel castro, quien estaba decidido a lanzar el primer ataque nuclear y sacrificar al pueblo cubano, sobre la base de su revolucion.

jueves, 9 de junio de 2005

Enanos mentales o gigantes del honor



‹”La sonrisa alelada del bufón o el enano falsamente erudito con sus libros que nunca podrá comprender o el militar sin gloria y sin batallas cuya indumentaria de general jamás saldrá de las amplias estancias palaciegas, es una "Galería palaciega de los monstruos" que hoy no nos hace ninguna gracia. O los retratos de Felipe IV y su enano de inteligencia tal vez normal a quien el monarca acaricia y manosea. Tal vez un alcahuete y correveidile en el ambiente de una Corte mezquina, decadente e intrigante y corrupta. A estas pequeñas gentes se les otorgaba la concesión de divertir y bromear pero también como trueque de una relación tan próxima como sus dueños les concedían. Como confidentes, se les permitían licencias extraordinarias de trato en un sentido de igualdad jamás toleradas al ciudadano normal. Porque el enano era como un reflejo deformado del patrón que los alimentaba. Tanto fue así que la reina Isabel I de Inglaterra tenía uno llamado Monarca”›

En los institutos de formacion de oficiales de la Fuerza Armada Nacional (FAN) existe un formato de requerimiento academico, que se prolonga a traves de las escuelas de armas y servicios, escuelas de estado mayor y se abrocha en el mas alto centro de capacitacion profesional de la defensa, el Instituto de Altos Estudios de la Defensa Nacional (IAEDEN).
Esa exigencia tiene el siguiente formato de manera general "Usted es el Comandante de una unidad y se le presenta esta situacion tal (Aca se le desarrolla una situacion operacional o administrativa para que el Comandante se enfrente a una decision), cuales son:
1. Su decision,
2. Sus acciones, y
3. Sus ordenes."

En sintesis, el punto es que el aprendizaje mas importante para un militar, es saber abordar de una manera resuelta y energica un proceso de TOMA DE DECISIONES y enfrentar las consecuencias de ello.

El General de Division (Ej.) Raul Baduel en una rueda de prensa ofrecida el dia viernes 3 de junio de 2005 indico que "no habia recibido instrucciones para conceder un reconocimiento honorario a Fidel Castro" y que en efecto "una promocion de oficiales de estado mayor habia propuesto el nombre de Fidel Castro como padrino de la promocion y el habia elevado eso hasta el ministro de la defensa, como su superior".

Lo mas importante de la rueda de prensa no fue lo que dijo; sino lo que no dijo.
En ambos casos, es obvio que la decision y proposicion para el ascenso a General en Jefe del Ejercito Venezolano de Fidel Castro y su padrinazgo en la promocion de estado mayor, son originarias de Hugo Chavez. En ambas, la decision arribara a los tres soles para Fidel y el uso de la figura del barbudo para apadrinar estos oficiales.

La inquietud de la opinion publica es conocer cual es su postura y cual fue la recomendacion institucional del General de Division Comandante General del Ejercito ante ambas propuestas. Ambas situaciones atañen al Ejercito, ambas van a trascender mas alla de la gestion de Baduel, ambas afectan la medula institucional de la vida del Ejercito, ambas han debido ser valoradas en los distintos niveles de estado mayor antes de elevarse al Ministro de la Defensa; por ejemplo, cuando los alumnos elevaron la propuesta al General de Brigada Director de la Escuela Superior del Ejercito, ¿cual fue la decision de este y cuales fueron sus acciones? Igualmente, este se la llevo al Comandante de las Escuelas del Ejercito, ¿Que recomendo este en el documento de tramitacion y este a su vez, cuando la llevo al Comandante General del Ejercito, que recomendacion transcribió?

Fuera de la Linea de Mando Organica, seria interesante tambien, que la opinion publica conociera cual fue la opinion del Cuerpo de Generales del Ejercito ante este ejercicio de zalameria organizacional y sumision institucional.

Pero el documento mas importante, desde el punto de vista historico de la institucionalidad del Ejercito, es el elaborado por el General de Division Raul Isaias Baduel para tramitar la aprobacion del nombre de Fidel Castro para apadrinar esa promocion. Ese punto de cuenta es el certificado de defuncion del Ejercito, de su historia, de sus logros, de sus honores de combate, de su trayectoria y al mismo tiempo es enterrar el orgullo de sus jornadas de combate, de sus cinco teatros de operaciones para el combate anti-subversivo, de la placa diagonal al Patio de Ejercicios (entre un roble y un saman) de la Academia Militar de Venezuela donde estan reseñados los muertos en el Campo del Honor, de un pedazo de la historia heroica del componente y en fin; esa decision hace muy poco en beneficio del texto del coro del himno del Ejercito, cuando señala: "Adelante marchemos valientes, al combate y al rudo fragor, por la Patria muy altas las frentes, despleguemos pujanza y valor".

Plutarco, un historiador griego nacido en Queronea (50 - 125?) publico una famosa obra denominada Vidas Paralelas, donde establecia un paralelismo entre los heroes griegos y los latinos y se asociaban sus biografias. Sin necesidad de tramontar tanto en el tiempo, nuestra historia contemporanea esta aparejando dos casos de Comandantes General del Ejercito, donde ambos tienen que tomar una decision y enfrentarse a las consecuencias de ella con valor, honor y lealtad a los principios de la institucion que juraron defender.

En 1979, al inicio del gobierno de Luis Herrera Campins, era Comandante General del Ejercito el General de Division Arnaldo Rafael Castro Hurtado. La paz democratica del pais se estaba consolidando por la via de una decision de estado que se llamo el Proceso de Pacificacion de la Guerrilla; mediante el cual se abrieron cauces para que el grupo de venezolanos que estaba enfrentado en armas a la democracia, se incorporara a la lucha politica a traves de metodos democraticos y pacificos. En desacuerdo como estuvo, el General Castro Hurtado, de beneficiar con esta medida a un grupo de guerrilleros que cumplian sentencias en el Cuartel san Carlos y estaban involucrados en hechos de sangre contra las Fuerzas Armadas Nacionales; se nego a convalidar con su presencia en el Alto Mando Militar una decision con la que estaba abiertamente en desacuerdo. Sobre esa base tomo una DECISION con valor, honor y lealtad a los principios del Ejercito y prefirio ser relevado del cargo. Ese General prefirio ser consecuente y solidario con sus arquetipos profesionales y personales, antes que traicionar su trayectoria profesional y los valores de la institucion que representaba.

Todos los dias del mundo; los militares profesionales que conocen de este pedazo de nuestra historia contemporanea como pais y como Ejercito Venezolano, observan la figura venerable y noble de un señor respetable de edad avanzada, que todas las mañanas hace su caminata aerobica a traves del Fuerte Tiuna, sin la tormenta de sus recuerdos de viejo soldado que dejo de cumplir con sus obligaciones de jefe y si, con la satisfaccion del deber cumplido y con el reconocimiento de sus subalternos al valor con que enfrento una DECISION.

!Al fin y al cabo los militares, lo que mas aprenden es a tomar decisiones!
Por eso insistimos, lo mas importante de la Rueda de Prensa del viernes 3 de junio de 2005, del General de Division que esta ocupando el mismo cargo que ocupo en 1979 el General de Division Arnaldo Rafael Castro Hurtado; es lo que no se dijo, !Su decision, sus acciones y sus ordenes!

Es una excelente referencia para establecer un paralelismo entre una DECISION de 1979 y Otra DECISION en el 2005. Solo asi, deduciremos como caminarâ aerobicamente en el Fuerte Tiuna dentro de 10 años el General de Division (Ej.) Raul Isaias Baduel.

¿Qué son estos sujetos militares, enanos mentales o gigantes del honor?
Caracas, 9 de junio de 2005

lunes, 6 de junio de 2005

Entre Romanos y Griegos





Estos dos militares arrastran entre ambos, un paralelismo, similar al que escribio Plutarco para reseñar la vida de los heroes romanos y los griegos.El General Castro Hurtado en 1979, siendo Comandante General del Ejercito se nego a convalidar con su presencia en el Alto Mando Militar, una decision que tomo legal y legitimamente el Presidente de la Republica y Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas Nacionales, el Doctor Luis Herrera Campins relacionada con beneficiar con la politica de pacificación a un grupo de guerrilleros que estaban encarcelados en el Cuartel San Carlos y quienes habian participado en hechos de sangre (Guerra Asimetrica) de manera artera contra unidades de las Fuerzas Armadas Nacionales. Castro Hurtado solicito su pase a la situación de retiro, para demostrar su inconformidad con la decisión.El General Baduel esta tramitando ante “la superioridad”, autorización para que una promocion de estado mayor, proxima a egresar de la Escuela Superior del Ejercito, lleve el nombre de Fidel Castro Ruz e igualmente, señalo en rueda de prensa, que no habia recibido instrucciones para “honrar” con el grado de General en Jefe del Ejercito Venezolano al mismo personaje. En las dos situaciones el General Baduel escuda en las faldas de sus superiores, su manifiesta incompetencia, su marcada ignorancia y su ineptitud para el alto cargo dentro de la institución militar.¡Que coincidencias en la situación para ambos jefes militares! El mismo personaje siniestro, del barbudo caribeño que ha “profanado el sagrado suelo de la Patria” es el eje alrededor del cual orbita el mismo dilema moral y etico para tomar una decisión y; sin embargo los caminos institucionales se bifurcan y divergen.En uno, la decisión se orientó hacia los dictados de los valores, los principios, los codigos morales de la institucion representada, el honor y el valor. En otro, el rastacuerismo bolivariano, la sumisión grupal, la genuflexión entreguista, la ignorancia institucional, el lamesuelismo como conducta, la desubicacion historica, la postración moral,la cobardia personal, la extenuación perruna y el aventurerismo organizacional, fueron los faros de su vuelo gallinaceo y bastardo.¿Quien es el romano y quien es el griego?A mi me parece que el griego es el General Arnaldo Castro Hurtado con su actitud y su valor personal; y el rumano (Nicolae Ceacescu, es Baduel.
Caracas, 6 de junio de 2005