lunes, 12 de septiembre de 2005

La revolucion de los claveles

Los hechos históricos tienen la virtud de que en cualquier parte del mundo se repiten. Distintos actores, diferentes factores, distintos líderes, épocas diametrales pero la situación es la misma y las consecuencias pueden también ser desiguales, sino se observa con juicio histórico el hecho político y se adecua a la realidad y el entorno.Allí es donde debe privar el valor de la referencia, el peso del factor histórico; pero más allá de ello, la altura estratégica de los líderes de la coyuntura.

Esto lo digo, porque nuevamente los Eneas de la Coordinadora Democrática (CD) han empujado las extremidades inferiores, hasta más allá de las rodillas.Los estrategas de la Coordinadora Democrática (CD) han dejado pasar una oportunidad de oro, en el proceso de adelantar la salida del dictador Hugo Chávez y con ello, el régimen nc²m²t (Narco-comunista-castrista-marxista-maoísta-terrorista).La decisión estratégica adelantada por los brillantes cerebros de la correspondiente comisión, ha afinado como mensaje a la gran ¿mayoría? institucional activa, en la Fuerza Armada Nacional (FAN), que no se presenten al Reafirmazo, para que no corran los riesgos de que sean sometidos a un Consejo de Investigación y como consecuencia de ello, pasados a la situación de retiro.Todo ello partiendo de una premisa, que hasta el momento nadie ha podido demostrar contundentemente; y en la que nadie, léase bien, nadie tiene garantía de la demostración.

La inferencia de señalar: “La mayoría institucional de la Fuerza Armada Nacional (FAN), va a actuar en el momento oportuno para garantizar la vigencia de la Constitución Nacional” merece que se le siga haciendo análisis, al fin y al cabo se esta dejando en manos de ella el destino de la patria, de la republica y, en ultima instancia, de la nación.Voy a continuar insistiendo sobre el delicado tema de la estrategia definida por la Coordinadora Democrática (CD) de lanzarles mensajes a los profesionales militares en situación de actividad, para que se cohíban de firmar en el acto de la oposición al gobierno de Hugo Chávez, denominado el Reafirmazo.Y lo voy a hacer, porque cuando se define una estrategia y esta empieza a ejecutarse los cambios que suceden sobre la marcha y son susceptibles de realizarse tienen un nombre y un apellido en el proceso de toma de decisiones. Eso es lo que se llama en las Escuelas de Estado Mayor, una Apreciación de la Situación de Conducción.Ningún plan es rígido por naturaleza. Tiene una característica que se llama flexibilidad. Esto significa que es capaz de adecuarse a las situaciones cambiantes y variables. Y esas son las características de la actual situación política, en la cual se esta ejecutando las estrategias en un ambiente de incertidumbre en la acera opuesta al Faraón en alpargatas.

¿Alguien tiene elementos concretos a la mano para decir que la mayoría de la Fuerza Armada Nacional (FAN) es institucional?¿Alguien tiene evidencias, indicios, realidades de que van a actuar?¿Qué es el momento oportuno?¿Ha habido desde hace dos años para acá, momentos oportunos?De ser así ¿Se ha actuado?¿Cómo se concreta ese momento oportuno?¿Quién lo establece?¿Cómo se actúa en el momento oportuno?

¡No me vayan a salir con la expresión etérea y sublime de: “Los profesionales constitucionalistas se pondrán al lado de la mayoría de los venezolanos, en el momento que el gobierno le de un manotón a la mesa”. Asumo que están hablando del momento oportuno. Eso que en planificación operacional militar se llama el Día “D” y la Hora “H”. Y esta expresión, cuando se le hace la disección correspondiente, también deja ver muchas costuras internas y menos aún, acepta un sesudo análisis o el mas esperanzador de “! Ya ellos sabrán que hacer”!Por cierto, ¿Qué significa, se pondrán al lado de los venezolanos?

Mayoritariamente se habla de el desencadenamiento de una desobediencia generalizada y activa ¿? de la mayoría institucional; un planteamiento que no tiene asidero planificacional estructurado y orgánico, porque nadie se ha preocupado de enviarle a la mayoría institucional el mensaje de ¿Cómo se hace eso? Es decir ¿Dónde está el plan?Y cuando señalamos nadie, estamos hablando en primer lugar de la Coordinadora Democrática (CD), el Bloque Democrático (BD), la Plaza Altamira, el Frente Institucional Militar (FIM), los jefes militares sin filiación grupal alguna (Los realengos) e incluso la Alianza Militar por Venezuela (AMV).

Todos cifran sus esperanzas del cambio, en la actuación institucional de la Fuerza Armada Nacional (FAN), pero no le dicen ¿como actuar? Y estamos hablando del sector institucional de la Fuerza Armada.Nadie puede esperar que el Ministro de la Defensa, el Inspector General de la Fuerza Armada, el Jefe de Estado Mayor Conjunto, los cuatro comandantes de componente, el jefe del CUFAN y el Comandante de la Tercera División de Infantería se le presenten a Hugo Chávez, a conminarlo a cumplir con la Constitución Nacional de la Republica Bolivariana de Venezuela, los resultados del Reafirmazo o del Revocatorio; o sencillamente sacarlo por la fuerza del mando. ¡Eso no va a ocurrir!

Para mejor interpretación del momento, remítanse a La actuación de la Fuerza Armada Nacional (FAN) después del revocatorio, de mi autoría el 29 de julio de 2003. Sin quitarle un punto o una coma, eso va a suceder así.Entonces, habrá que esperar que los cuadros intermedios, sean los que se pronuncien (Coroneles no comprometidos, Teniente Coroneles, Mayores, Capitanes, Tenientes o Sub-Tenientes y equivalentes, Suboficiales Profesionales de Carrera, tropas Profesionales y Alistadas).Pero para eso que eso ocurra, alguien debe decirles ¿como hacerlo?, ¿donde hacerlo?, ¿con que hacerlo? Y ¿cuándo hacerlo?; es decir, hay que establecerle una planificación estratégica que atienda y se engrane con lo político del país.Si eso no ocurre así, el gran triunfador va a ser el “cazagüirismo” y con ello Hugo Chávez, quien regresará nuevamente triunfante al poder.¿Eso será muy difícil de comprender, señores de la Coordinadora Democrática (CD), Bloque democrático (BD), Frente Institucional Militar (FIM), Alianza Militar por Venezuela (AMV) y realengos de todos los ordenes?¡Estamos hablando de concreciones, realidades, materias, hechos, etc. Nada de contexto, expectativa, promesas!

Ningún planificador serio se aventura a montar un plan con expectativas, esperanzas, posibilidades, etc.Y eso es lo que ha ocurrido hasta el momento con los arquitectos de la estrategia política de ese saco de grillos que llaman la Coordinadora Democrática (CD)Es indiscutible que hasta el momento, quienes diseñan la estrategia de la Coordinadora Democrática (CD) carecen del elemental sentido de la oportunidad, no tienen la cultura histórica de los acontecimientos políticos mundiales y los alcances de sus diseños de largo aliento, no pasan mas allá de organizar un campeonato de bolas criollas en Calcara del Orinoco y el desfile de las comparsas en el carnaval de Carúpano.

No faltaba más, en un comité, mayoritariamente formado por los derrotados en las aventuras posteriores del 11 de abril, la campaña de la Plaza Altamira, la Guerra Civil del Paro de diciembre, la Operación Comando del Referendo Consultivo y el Plan de Operaciones de las firmas de agosto.Con ese largo historial de derrotas, nada hacía prever en el horizonte inmediato, que nuestros diseñadores estratégicos pudieran parir una idea nada brillante, para enviar y mercadear hacia los profesionales militares que se encuentran en situación de actividad.No se les ocurrió nada mejor, que proteger a los profesionales militares en situación de actividad, para esperar el momento táctico de la actuación, la circunstancia estratégica que iniciará el proceso de defenestración del régimen.Ese es un pésimo mensaje para el resto de la sociedad civil. ¡Los civiles cuidando a los militares y resulta que es al revés el negocio!Mientras tanto, sus firmas para el Reafirmazo, duermen el sueño de los siempre nunca jamás vencidos.Bajo el argumento pueril e inconsistente de que las firmas de los militares son un número demasiado pequeño; nuestros Leonidas de la Coordinadora Democrática (CD) no se les ocurrió nada mejor que lanzarles mensajes para que no firmaran. ¡Menos mal que no fueron comisionados para planificar el Paso de los Alpes!Por primera vez en la vida de una elección, una actitud triunfalista – sin algún tipo de soporte – desdeña ocho o diez mil votos para consolidar una posición. No hay que olvidar que el Referendo Revocatorio será la consecuencia de triunfar en el Reafirmazo. ¡Sin triunfo en el Reafirmazo no habrá Revocatorio!Olvidan nuestros planificadores estomacales, que el voto militar no vende cantidad, sino calidad. La calificación que envían hacia lo interno de la sociedad civil y la comunidad internacional, cuando hacen acto de presencia mayoritaria en los centros de recolección de firmas.

¿Qué pasaría, sin en lugar de promover la abstención militar para el Reafirmazo; se hubiese motivado la participación de todos los militares en situación de actividad en esta jornada?¿Qué ocurrirá si todo ese caudal mayoritario institucional se presenta el día 28, 29, 30 de noviembre o el primero de diciembre a manifestar su intención de participar constitucionalmente, en una jornada que es un derecho individual?¿Cómo se interpretaría en el Alto Gobierno, la Comunidad Internacional, los organismos multilaterales, la sociedad civil el mensaje de la participación masiva y entusiasta de la gran mayoría institucional de la Fuerza Armada Nacional (FAN) en el Reafirmazo?

Demás está decir que ello entrañaría una planificación ad hoc con un objetivo estratégico que diseñarían los Aníbal de la Coordinadora Democrática (CD), los Leonidas del Bloque Democrático (BD), los Eneas del Frente Institucional Militar (FIM), los Julio Cesar de la Alianza Militar por Venezuela (AMV) y todos esos Napoleón de botiquín que andan mostrencos colectivamente.Pero, lo mas importante, es que eso uniría a toda la disidencia política y militar en torno al objetivo común de lograr la mayor cantidad de militares en una fila, para firmar por el revocatorio, con los consecuentes efectos que ello derivaría ¿No les parece?Para ponérselo facilito a los generales y almirantes de la Coordinadora Democrática (CD) que ¿asesoran? al más alto nivel de la oposición. Para llegar al objetivo hay que pasar por la Posición de Ataque (PA) desde el Área de Reunión (AR); desde esta, hay que cruzar la Línea de Partida (LP) y luego empezar a reducir las posiciones iniciales del enemigo, hasta que se llega al objetivo final; incluso al llegar a este hay que ejecutar dos tareas fundamentales que son la reorganización y la consolidación ¿Les recuerda eso las primeras horas del 12 de abril?Un poco para tomar referencias, de que un proceso político tan complejo como el actual, debe ser abordado con la disposición de la imaginación de un cineasta, la fertilidad conceptual de un cuentista, la agudeza en el detalle de un artista, la clarividencia de otras profesiones que desborden la conjetura inmediatista de quienes se sienten ungidos para representar la disidencia, y que sus planteamientos deben ir mas allá de la experiencia de organizar un desfile militar conjunto o una operación militar para deforestar las cordilleras de la serranía de los Montes de Oca en el estado Zulia, le vamos a poner en bandeja de plata un ejemplo histórico que les puede motivar una imaginación tan petrificada y marmórea como la de la famosa Comisión de Estrategia de la Coordinadora Democrática (CD).

Todo empezó con una flor introducida por una florista de una calle de Lisboa en el cañón de un fusil de un militar cuando los militares, apoyados por la población civil, desterraron 42 años de dictadura, precisamente militar. El 25 de abril de 1974, hace 29 años, un grupo de militares portugueses, a los que se adhirió de forma inmediata y entusiasta la población civil, acabó con la dictadura salazarista, que padecía Portugal desde 42 años antes, y abrió el camino hacia un régimen democrático.Pero lo peculiar y verdaderamente novedoso de aquel movimiento es que no fue un "golpe militar" a la antigua usanza, no siguieron el librito al que hace referencia el Káiser Barinés de Curzio Malaparte; ni el Manual del Perfecto Golpe de Estado Latinoamericano; sino un movimiento cívico-militar que, en sus inicios, pretendió remover los cimientos del país y no sólo cambiar su régimen político.

La revolución de los claveles, como se denominó aquel movimiento por los claveles que los soldados sublevados decidieron colocar en la punta de sus fusiles, reorientó esencialmente la trayectoria de Portugal e influyó también, aunque sólo fuera por la fuerza de su contagio, en la desaparición de la dictadura franquista en España. Hasta esa fecha Portugal había permanecido casi el medio siglo bajo un régimen fascista.El denominado ‘Movimiento de los capitanes’, surgido en el seno de las Fuerzas Armadas (uno de los principales soportes del régimen dictatorial) desde los cuadros intermedios de la organizacion, se materializó, a mediados de 1973, en torno a reivindicaciones corporativas y, rápidamente, adoptó un carácter político de contestación a los fundamentos del sistema que imponía la prolongación indefinida de una guerra sin solución militar e históricamente condenada. Una vez decidido el derrocamiento del gobierno por la vía de las armas (5 de marzo de 1974), las dimisiones de Antonio Spínola y Francisco da Costa Gomes de los cargos más altos de las Fuerzas Armadas (13 de marzo de 1974), por negarse a mantener el apoyo a la política de Marcelo Caetano, precipitaron los acontecimientos: el Regimiento de Caldas da Rainha se movilizó, pero pronto resultó sometido, con la consiguiente detención de sus cabecillas. Era el anuncio de la revolución vencedora desencadenada en la madrugada del 25 de abril del mismo año, entonces apoyada mediante un plan operativo global y articulado. Columnas militares procedentes de varios lugares del país ocuparon pacíficamente los puntos estratégicos de la capital y se produjo, pocas horas después, la rendición del presidente del Consejo, Marcelo Caetano. Sus autores se presentaban como Movimiento de las Fuerzas Armadas (MFA), suscribiendo un programa en el que se garantizan los derechos y libertades de los ciudadanos, en un régimen de democracia pluralista; dicho Movimiento decretó la eliminación de las instituciones del régimen depuesto y se comprometió a convocar elecciones para una Asamblea Constituyente, afirmando la necesidad de una nueva política económica y social y anunciando el inicio del proceso de descolonización. El clavel, ofrecido efusivamente por la población a los soldados, y colocado por éstos en el cañón de las ametralladoras, se convirtió en el símbolo de esta acción notable, apoyada por la inmensa mayoría de los portugueses.Una facción institucional de las fuerzas armadas portuguesas, que para el caso venezolano muy bien pudiera ser la Mayoría Institucional (MI) de la actual Fuerza Armada Nacional, el MFA, se sublevó contra el gobierno portugués y la dictadura salazarista.

Si el MFA (Movimiento de las Fuerzas Armadas) era de izquierdas o de derechas era algo que no estaba claro en esas fechas. El pronunciamiento militar generó un espacio en el que el pueblo podría lograr un cambio real en su vida y la oportunidad fue rápidamente aprovechada.En 1968, debido a problemas de salud, Oliveira de Salazar abandona el poder y es sustituido por Marcelo Caetano. El cambio será sólo superficial y se recrudece la represión contra los opositores al régimen, aislado internacionalmente (Ese es el caso venezolano). La ONU presiona para que cambie su política colonial en África pero Portugal, que soporta una enorme sangría económica, no hace caso. En el caso nuestro esta presionando la ONU, la OEA, Estados Unidos, la Unión Europea (UE), España, Colombia y ni hablar de la sangría económica que estamos padeciendo.La agitación estudiantil y obrera (Esto tranquilamente puede ser canalizado por los factores que controlan esos sectores en el lado venezolano) protagoniza los últimos momentos del régimen, derrocado finalmente por la Revolución de los Claveles del 25 de abril. Este golpe, prácticamente incruento, se incubaba en el Ejército desde 1973. El 15 de mayo de 1974, la Junta de Salvación Nacional proclama presidente al general Spínola. Se reconoce el derecho de las colonias a la independencia, se procede a la liberación de los presos políticos y se suprime la censura. Del exilio regresan políticos como Mario Soares y en 1976 se aprueba una nueva Constitución. El 25 de abril de este mismo año se celebran elecciones parlamentarias, que son ganadas por los socialistas de Soares, quienes formaron el primer Gobierno Constitucional del país. Este gobierno era una coalición que incluía al Partido Socialista y al Partido Comunista (Un poco así como decir Acción Democrática y Bandera Roja en Venezuela). La otra gran presencia en este proceso político fue la de los trabajadores en la TAP, la equivalente de la Central de Trabajadores de Venezuela (CTV). En síntesis, lo que se quiere magnificar, es que la salida del dictadorzuelo venezolano debe entrañar una estrategia que articule el centro de gravedad de los acontecimientos político militares, que se nuclea alrededor del sector institucional de la Fuerza Armada Nacional (FAN) y la gran masa movilizada de la sociedad civil. Y para ello debe articularse previamente un acuerdo político de los factores más representativos de la sociedad que estén ganados para una salida política de esta naturaleza, pero eso será motivo de una crónica mas detallada posteriormente.

¿Cómo se desarrollaron los acontecimientos en Portugal hace 29 años?
A las doce y media (00:30 hrs.) de la madrugada del 25 de abril de 1974 se emitía por Radio Renascença la canción Grandola, vila morena; era la señal elegida por los capitanes del Movimiento de las Fuerzas Armadas (MFA) para poner en marcha el golpe militar que pondría fin a la dictadura más vieja de Europa.A las dos y media de la tarde (14:30 hrs.) del día 25 el MFA comunicaba que el primer ministro, Marcelo Caetano, se encontraba cercado por las fuerzas del ejército en el cuartel de la Guardia Nacional Republicana (GNR) del Carmo, una suerte de Guardia de Honor en el Palacio de Miraflores; mientras que otros miembros del gobierno estaban en igual situación en el cuartel Lanceros 2. Estos dos cuarteles, el de la PIDE, la cárcel de Caxias (donde estaban parte de los presos políticos que los miembros de la PIDE amenazaron con asesinar) y algunos centros de la Legión Portuguesa (grupo ultraderechista afín al régimen) y de la policía eran ya los únicos focos de resistencia que existían y protagonizaron los momentos más tensos de la jornada.El MFA envió un ultimátum a ambos cuarteles. A las cuatro de la tarde (16:00 hrs.) Lanceros 2 se rendía incondicionalmente y poco después, a las cinco y media (17:30 hrs.), tras algunos disparos, se rendían la GNR y Marcelo Caetano. El presidente del gobierno, Américo Thomás, sustituto del difunto Salazar, era detenido a esa misma hora en su casa. Era el fin de 42 años de dictadura. El último foco de resistencia, el cuartel de la PIDE, se rendía a las 9,45 (09:45 hrs.) horas de la mañana del 26 de abril.

La acción militar del MFA fue incruenta. Tal era la podredumbre del régimen. Exceptuando la resistencia de los miembros de la PIDE, que provocaron cuatro muertos y varios heridos al disparar a la muchedumbre que rodeaba su cuartel general en Lisboa, todos los puntos principales del gobierno y la Administración cayeron casi sin resistencia.

La acción del MFA abrió las compuertas que dieron salida a un impulso contenido por la oposición portuguesa.Los trabajadores y las amas de casas salieron a la calle, inundaron las plazas, participaron con los soldados y suboficiales en todos los episodios claves del derrumbamiento de la dictadura. Ese ambiente, esa fuerza, conectó rápidamente con la base del ejército, con los soldados y oficiales de baja graduación. Los mandos formales habían perdido el control efectivo del ejército; las decisiones operativas habían pasado al pueblo, respondiendo a sus demandas de cambio y de renovación.

En el relato periodístico Revolución Portuguesa, 25 de abril, de Humberto da Cruz y Carmen Espinar, se refleja la situación explicando que "un aspecto fundamental de los acontecimientos de la jornada, fue la progresiva incorporación popular al MFA. El pueblo de Lisboa, después de un primer momento de incertidumbre, comenzó a seguir los pasos del MFA en la calle. El cerco del cuartel del Carmo y, posteriormente, la DGS-PIDE, fueron los principales centros de atención", y más adelante que "en la tarde del 26, el movimiento popular, aunque sigue siendo fundamentalmente espontáneo, empieza a expresarse más coherentemente y a tomar un papel más activo y determinante en los acontecimientos, apareciendo así, junto al MFA, como uno de los motores fundamentales de las transformaciones que se irán sucediendo...". El capitán Salgueiro Maia, encargado de tomar los puntos neurálgicos de la capital el día 25, explica cómo "el apoyo popular fue extraordinario y contribuyó bastante a que el cuartel del Carmo abandonase cualquier mínima idea de resistir. El ambiente que se vivió allí no tiene descripción" (El País, 25-4-99). La entrada en escena de la clase trabajadora, con sus aspiraciones y su fuerza, cambió completamente la situación. Sí, había caído la dictadura, pero había que poner fin a la miseria, a las desigualdades, a la falta de infraestructuras sociales. Sí, había caído la dictadura pero ahora la tarea era construir la nueva sociedad y adelantar un proceso de unidad y reconciliación. Se desató un fuerte y amplio movimiento reivindicativo. Seis días después del 25 de Abril, el 1º de Mayo, un millón y medio de personas se manifiestan en las calles de Lisboa, una cifra aún más impresionante si tenemos en cuenta que la población de Portugal era de 7 millones de habitantes. Sin embargo, más allá de derrocar al gobierno de la dictadura y plantear la necesidad de una solución política al problema colonial, los dirigentes del MFA no tenían ningún programa ni ninguna perspectiva. ¡Eso se parece bastante a la situación actual en Venezuela! Paradójicamente la dirección del MFA, con la bendición de los dirigentes de los dos principales partidos obreros (PS y PCP) inmediatamente después del 25 de abril, pone al frente del nuevo gobierno a Spínola, general en torno al que, en el periodo de un año, la reacción intenta por tres veces frenar violentamente el proceso de transición, y por tres veces fracasa. Sin la participación masiva y entusiasta de las masas en todo el proceso, que empezó el mismo día 25 de abril y duró más de un año, los cambios adelantados por el movimiento de Capitanes, se hubiera extinguido rápidamente.

La Revolución de los Claveles tuvo muchas originalidades, y la mayor de ellas tener como desencadenante un pronunciamiento militar pacifico; pero tuvo también todos los rasgos clásicos que pudieran caracterizar el actual estado de cosas de la situación política venezolana, incluyendo el más importante: la participación consciente de las masas y su peso decisivo en todo el proceso. Hoy, a 29 años de una revolución que casi cambia el rumbo de la historia en Europa y en todo el mundo, la referencia que mejor podemos hacer, como mínimo, a esa generación de trabajadores y jóvenes portugueses es aprender las lecciones de aquellos hechos; asimilarlas conscientemente para que sirvan como una fuente de inspiración y un instrumento de lucha para el futuro, especialmente en el caso de Venezuela.

¿Alguno de esos genios de la estrategia de la Coordinadora Democrática (CD), el Bloque Democrático (BD), el Frente Institucional Militar (FIM), la Alianza Militar por Venezuela (AMV) y los realengos grupales; sabrán que existió ese movimiento político militar que se denominó La revolución de los claveles?¿Cuáles serán las coincidencias y las diferencias entre ese hecho que ocurrió hace 29 años y el proceso político venezolano?¿Cuál enseñanza político militar de ese proceso derivará para nosotros?

Aun hay oportunidad para dar un golpe de timón y admitir como un error estratégico, la decisión de mercadear la abstención militar en el Reafirmazo. Es necesario hacer una apreciación de la situación de conducción y tomar una nueva decisión sobre la base de nuevos acontecimientos, nuevas variables y otros factores intervinientes en la conclusión apreciativa.

¡Tal cual como vamos nariceados por los brillantes estrategas de la Coordinadora Democrática (CD), estamos definiendo la revolución de las Plastas!

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