lunes, 24 de marzo de 2008

¿ ES O NO EX ?

He oído de todo en estos últimos años de la Revolución Bolivariana, en relación a los problemas de los militares retirados. Realmente es lamentable la situación de los profesionales que se encuentran en la honrosa situación de retiro. Después de haber pasado cualquier cantidad de años sirviendo a la patria “la satisfacción del deber cumplido” no basta para enfrentar los problemas derivados de la salud y fundamentalmente los económicos, que son los que mas hostigan, cuando se pasa la frontera de la edad de los metales.
Nadie en estos momentos va al supermercado de la esquina y pide un kilo de carne de la más modesta y entrega, según el método socialista del trueque que está impulsando Hugo Chávez; la Orden Militar Rafael Urdaneta en primera clase con la cajita y todo, para cancelar la factura. Lo peor que puede ocurrir es que el carnicero, como no tiene efectivo para dar el vuelto, nos entregue dos caramelos. Del resto todo se va en la burocracia e ineficiencia que ha caracterizado todo tipo de agrupación dirigida por militares rojos rojitos. Pero mas grave que eso, es la dejadez, la parsimonia, la inercia y el desden con que se asume desde el vasto sector retirado, para reclamar los derechos a una honrosa situación de retiro que vienen siendo conculcados desde que el huracán revolucionario se posó en Miraflores.
Estos tiempos de revolución han servido para muchas cosas, pero en primer lugar han permitido diseccionar hasta el hueso, hasta donde la relación del costo de la institución armada revolucionaria, está en sintonía con los beneficios que se le proporcionan a la colectividad a la que sirve. Un cuerpo donde todos sus integrantes son incapaces de pelear por los beneficios socioeconómicos que respaldan el cumplimiento de sus deberes, deja bastante para especular en cuanto a la eficiencia, la efectividad y la eficacia del cumplimiento de su misión. Y esto va mas allá de la calificación de mercenario que se le quiera endilgar a esta defensa a envainar el sable con un mínimo de comodidad.
Los viejos tiempos de una materia que se estrujaba hasta el cansancio en el cerebro a los cadetes, que se llamaba Mando y Conducción (Ahora transmutada en Liderazgo) indicaba que los tareas básicas de un conductor eran el cumplimiento de la misión y el bienestar de sus hombres. Ninguno de esos dos vectores era mas importante que el otro; ambos se complementaban y suplementaban. No se podía llegar hasta conquistar el objetivo con una tropa desmoralizada, mal alimentada y peor tratada. Era valido también que una fuerza con “la moral a millón” pero sin ninguna identificación con el objetivo, la ignorancia en sus funciones y una dislocación funcional en la misión que iban a cumplir, iba directo al fracaso. La habilidad de un líder era mantener el justo equilibrio entre un soldado bien atendido y la sintonía con la misión institucional. Eso no lo han detectado aún los jefes actuales; mucho menos el Comandante en Jefe.
La problemática socioeconómica de los militares retirados se ha ido incrementando exponencialmente porque la suerte de los asuntos que derivan en cuestión, se ha transferido de manera irresponsable, hacia unos entes que carecen de representatividad y legitimidad en primer lugar; en segundo lugar porque no han logrado determinar que la medula de todos los análisis de la misma reside en el carácter político que se le ha impregnado desde el mismo Palacio de Miraflores por el mesmo Zar Barinés y si es así, entonces la solución es política mas allá del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). Luego está el asunto ese de la eficiencia, la eficacia y la efectividad de las acciones y decisiones del Alto Mando Militar de ayer y de hoy que no merece el caso comentar para no elevar los niveles de la tensión arterial.
Si se quiere tomar la temperatura política de toda la Fuerza Armada Nacional (FAN) basta con encuestar al grupo de asiduos de la Panadería que esta por los predios del IPSFA. Sin temor a salirme del perfil de la realidad, estoy completamente seguro que más del 85 % de la muestra evaluada no estará de acuerdo con la forma como el Comandante en Jefe de la Fuerza Armada Nacional (FAN) ha manejado los asuntos de la política interna de la institución; especialmente los que apuntan hacia la situación socioeconómica de sus integrantes. ¿Se acuerdan del bienestar de los hombres? No voy a hablar del cumplimiento de la misión; los remito a la payasada de la movilización ordenada a raíz del incidente entre Colombia y Ecuador.
Ese porcentaje simplemente transfiéralo hasta los militares en situación de actividad y entonces usted comprenderá porque el Comandante en Jefe, prefiere apretarle la tuerca del bolsillo a los retirados para que los activos se vean en ese espejo y asuman una actitud de tranquilidad y de calma chicha en los cuarteles. ¿Qué les queda a los colegas activos? Rendirse ante la evidencia de la corrupción o simplemente larvar en la institucionalidad del quince y del último hasta que inevitablemente les llega el pase a la situación de retiro. Pero no es ese el caso; la situación es ¿Por qué con el conocimiento indiscutible que se esta asfixiando la institución por la vía del mas débil jurídicamente, en este caso el militar retirado, no se activan otros mecanismos políticos distintos a los que tradicionalmente se ha apelado para presionar por los derechos de los viejitos? A mi particularmente, me gustaría participar en una manifestación de militares retirados protestando contra la injusticia de las decisiones socioeconómicas emanadas desde Miraflores por otro militar retirado; que bueno sería ver en una marcha de sobrevivientes a las viudas e hijos de militares retirados ya fallecidos, quemando aunque sea un cauchito de bicicleta para presionar frente al IPSFA, para protestar por las decisiones directas del teniente Coronel ® que hace las veces de Comandante en Jefe, quien le ordena al General de División en situación de actividad que hace las veces de Presidente del IPSFA, que le zurza los bolsillos a los viejitos de sable envainado.
Pero hay otras dudas que se ventilan ante la gran mayoría de los militares retirados. ¿Alguien ha visto entre los integrantes de IORFAN, Grupo Pichincha y demás entidades de militares retirados a ex ministros de la defensa, ex comandantes de fuerza, ex miembros del Alto Mando Militar, ex jefes de CAVIM, ex directores de administración del ministerio o ex directores de finanzas de los componentes pujando por los dineros que nos debe el IPSFA? Me gustaría saber si entre quienes pugnan por la solución hay algún ex Presidente de Horizonte, C.A de Seguros. ¡Que bueno sería ver entre el grupo algún ex Director del Circulo Militar! ¡Me agradaría saber que varios de los ex directores de Seguridad Social del Ministerio están rasgándose las vestiduras por los reales de los viejitos! ¿Se imaginan ustedes saber que entre quienes llevan cartas y solicitudes al Tribunal Supremo de Justicia hay algún ex Contralor General de la Fuerza Armada Nacional? Me conformo aunque sea con un ex Director General del Ministerio y abjuro de todo lo que he expuesto acá. Y si vamos a hablar de ex habilitados, ni hablar; esos forman parte de los Centauros, los Pegasos, la Quimeras y todo bicho mitológico que se les pueda ocurrir a ustedes; pero de que no los van a ver en esas reuniones, pueden estar seguros. ¡Fin de mundo ver en esos menesteres a un ex Presidente del IPSFA! La imaginación es libre de especular el porqué de la ausencia de esos ex.
La solución al problema socioeconómico de los militares retirados y de los militares en general, pasa por la salida de Hugo Chávez de la Presidencia de la Republica. Mientras no sea así, la gente del IORFAN continuará larvando en espera de que les baje con cien en conducta, el dozavo del Ministerio del Poder Popular para la Defensa; el Grupo Pichincha continuará en sus soporíferas e inútiles reuniones para introducir recursos, también inútiles ante el Tribunal Supremo de Justicia y la Corte Celestial; los demás entes de militares retirados se extinguirán en su inepcia organizacional, los viejitos continuarán tomando su café y arreglando el mundo en la panadería del IPSFA esperando que les solucionen el grave problema socio económico que los agobia y muriéndose en la inopia de la pobreza solemne y con la gloria de su Fragata de 1.987 durante la incursión de la ARC Caldas al Golfo de Venezuela, como lo está haciendo el CN Pierre Herrera Isturiz.
Espero que los ex de la vieja e institucionalizada Fuerza Armada Nacional tomen la batuta, opinen y se activen sobre el grave problema del bolsillo y del estomago de los militares retirados; e igualmente que los lideres de las organizaciones de militares retirados, comprendan que el problema se soluciona cuando Hugo Chávez sea también un ex Presidente y ex Comandante en Jefe de la Fuerza Armada Nacional.
Mientras tanto, yo estoy desmontando de la vieja pared de mi apartamento, el cuadro donde tengo montada la Orden Militar Rafael Urdaneta en Segunda Clase, para cambiársela al portugués del abasto, junto con las joyas de la orden; por cuatro canillas de pan, medio kilo de jamón de pierna y suficiente queso Paisa para la cena de hoy; el sable se lo ofrecí al italiano de la carnicería para trocarlo por un Solomo de cuerito y una botella de un buen vino francés que tengo reservado, para cuando Hugo Chávez pase a la condición de ex.

1 comentario:

Unknown dijo...

O sea, me imagino que usted es uno de los Cobardes y Burros de que habla el Presidente Comandante?